Dos trajes de primera comunión para niño presencian una escena que se repite a principios de cada mes en una angosta habitación de un chalet en Valencia. Hombres y mujeres pasan a recoger gratuitamente pasta, lentejas, aceite, leche o galletas, alimentos no perecederos con lo que más de 150 familias irán tirando buena parte del mes. Azucena Pelayo es la encargada de repartir unos lotes similares aderezados con detalles personales. A Lorena, con una melena rubia se le da suavizante para el pelo; a un niño se le deja elegir entre cajas de cereales y pregunta a un tercero si tiene pasta de dientes. También es la dueña de los trajes de comunión. Fueron de sus hijos y los ha traído porque una mujer le preguntó si podría echarle una mano también en eso.
Hasta aquí, la escena podría corresponder a cualquiera de los bandos de alimentos repartidos por España, en su mayoría, tentáculos de organizaciones como Cáritas o Banco de Alimentos Europeo. Pero es diferente, porque transcurre en una ONG llamada Hogar Social Patriota María Luisa Navarro y a ella se accede atravesando un patio y un salón trufado de banderas españolas, águilas imperiales y lemas a favor de “los españoles primero”. Cada mes entrega alimentos a las 154 familias censadas en función de sus necesidades y con el requisito de que sean españoles. Los alimentos los recogen voluntarios cada semana por todo Valencia. Así lo hacen desde que Banco de Alimentos les retirara de su lista de entidad colaboradora cuando se supo que estaba vinculada a España2000, un partido de extrema derecha cuyo líder, José Luis Roberto, es conocido en la Comunidad por sus negocios de seguridad y sus actuaciones a favor de una España sin inmigración.
“Según ellos, fue porque faltaba documentación, pero nos la quitaron porque se publicó que estaba vinculada al partido”, explica Pelayo en un descanso, Quedar fuera del Banco de Alimentos supuso tener que conseguirlos por sus propios medios pero también dar rienda suelta a la “prioridad nacional”, a entregar comida solo a españoles. “Queremos ayudar a la gente española, que hay mucha gente en la miseria”, dice Pelayo. España2000 está en contra del matrimonio homosexual, pero ayuda a parejas del mismo sexo. También a una mujer que tiene un hijo de padre no español, presume. “El requisito es que sean españoles, lo demás no importa”.
España2000 es el representante español del asistencialismo excluyente que protagonizan el partido neonazi Amanecer Dorado en Grecia. (“empezaron más tarde y lo llevan de otra manera, nosotros no somos tan como ellos” dice Pelayo), o del Frente Nacional (FN) en Francia, con el que tienen relación desde la época de Jean Marie Le Pen. En los tres casos y de un modo muy similar a la clave del éxito del islamismo en los países árabes, se trata de ayudar de forma palpable a los excluidos por el sistema. El paso siguiente es que vean la organización que les ayuda como opción para una política decente.
La diferencia es que mientras que el Frente Nacional se consolida como segunda fuerza política en Francia y Amanecer Dorado tiene 21 diputados en el Parlamento Europeo, España2000 es una formación residual con concejales en la Comunidad de Valencia y en Alcalá de Henares. Pequeño pero polémico. En Valencia el partido es conocido por sus manifestaciones contra la inmigración en los barrios con más inmigrantes. El mes pasado se plantaron en uno de ellos para repartir comida solo entre quienes enseñaron su Documento Nacional de Identidad. La fiscalía de Valencia estudia una denuncia por xenofobia y el Ayuntamiento les ha multado por contaminación acústica y ocupación de la vía pública.
Pero quienes se benefician de la ayuda no tienen problemas con la exclusión de los inmigrantes con las mismas necesidades. Culparles de los males de España y una supuesta discriminación en la distribución de las ayudas públicas son argumentos recurrentes, aunque no sean ciertos: las ayudas se reparten en función de las necesidades de cada uno y suele suceder que los inmigrantes están aún más desnudos que los españoles más necesitados. Critican que los centros de musulmanes solo reparten comida entre ellos, y si que funcionan con comida del Banco de Alimentos Europeo que no puede hacer distinciones. También, que hay paro entre los españoles por culpa de los inmigrantes. En el límite de la xenofobia, por necesidad o convicción.
Antes un vecino que un extranjero. Lorena, con tres hijos, un subsidio de 136€ y un exmarido con una orden de alejamiento por maltrato, no puede estar contenta con la ayuda que recibe. “Entiendo que todo el mundo necesita ayuda, pero no veo bien que vengan a quitarnos nuestro dinero para mandarlo a su país”, dice en alusión a las remesas que envían con parte de sus sueldos. Tomás, de 55 años y que lleva 3 en el paro asegura que “es mejor dar ayuda a tu vecino que a un extranjero, están haciendo una labor muy buena y hay que reconocer que hoy los españoles tenemos menos privilegios que los extranjeros”. Entre quienes reciben ayuda hay algún militante de España2000 y votantes a secas, como Alejandro, en el paro desde hace cuatro años. “Estos se mueven por la gente, el resto solo defienden sus intereses”.
La crisis proporciona a España2000 un discurso tan básico como las necesidades que cubre el hambre y consuelo moral en reuniones mensuales. En torno a una paella o una chocolatá que paga su líder, es el momento de impartir doctrina. No es un mitin, sino una llamada de atención a lo que España2000 hace por ellos, explica un asistente. No se habla de la situación de España. Roberto se refiere a lo que hacen ellos y no hacen otros partidos. “Queremos tener a la gente unida, no solo ayudamos con la comida sino que asesoramos para pedir una pensión o cualquier trámite”, afirma Azucena.
Hay cálculos sobre si la ayuda de hoy se traducirá en votos. Rodolfo Moral, afiliado, dice que “por supuesto. “Lo de votar no lo entiendo mucho, pero si necesitan algo que me llamen”, dice Lorena. Amanecer Dorado o el Frente Nacional francés se nutren de votantes que más que ideologizados están hartos de los partidos tradicionales. A los que acuden al hogar de España2000 no se les pregunta. Para Tomás, “la ayuda es buena” y entiende que “habrá gente que pueda votarles”. Preguntado sobre Amanecer Dorado, niega que tenga que ver con la gente que está conociendo. “Eso de las exaltaciones del fascismo no se ve aquí, lo único que se mira es ayudar a los vecinos”.
Fuente: NÚMERO 1.650 | del 9 al 15 de mayo | TIEMPO