España2000 ante la tragedia de Santiago de Compostela

La Junta de España2000

LAMENTA PROFUNDAMENTE el gravísimo accidente ferroviario que ha tenido lugar en Santiago de Compostela y que ha causado una cifra de muertos próxima al centenar.

DENUNCIA:

1) La incongruencia de un trazado del AVE que apenas permite en esa curva una velocidad de 80 km/h y que ya desde el viaje inaugural causó sobresalto en los pasajeros, sin que nadie hiciera nada para resolver la evidente deficiencia técnica.

2) Los últimos gobiernos españoles se han jactado de que España tiene más kilómetros de AVE que cualquier otro país, olvidando que hubiera sido mucho más racional impulsar el transporte de mercancías ferroviarias, mejorar las redes de cercanías o de medias distancias, antes que realizar un esfuerzo que solamente se justifica por las necesidades de la clase política de cobrar comisiones libres de impuestos, como se sabe desde el AVE Madrid-Sevilla de 1992.

3) Recuerda que ni Magdalena Alvárez, ni José Blanco, ministros de Fomento que impulsaron la línea del AVE en Galicia, ni Ana Pastor que inauguró el tramo en diciembre de 2011, carecían de la titulación y los conocimientos profesionales para poder establecer si el trazado que se les presentaba era el correcto para una línea de alta velocidad.

4) Que este accidente no es consecuencia -tal como ocurrió con el accidente que tuvo lugar en el metro de Valencia causando cuarenta muertos- de fallos humanos sino de fallos de seguridad, producidos al ahorrar en esta materia lo que se dilapida en comisiones a la clase política.

Que la persistencia de la crisis económica, la prioridad en el pago de la deuda, las escasas posibilidades de recuperación económica en los próximos años, terminarán creando un problema de obsolescencia de las infraestructuras que repercutirá en la merma en la seguridad de carreteras, autopistas, aeropuertos y servicios públicos.

Que se llegue hasta el final en la investigación judicial sobre el accidente, se depuren responsabilidades y se sitúa la seguridad en las comunicaciones por encima de otras prioridades.