España 2000, a través de su gabinete jurídico, ha presentado una denuncia para esclarecer si los incipientes casos de vacunación que estamos conociendo recientemente de cargos públicos y liberados sindicales obedecen a un posible delito de tráfico de influencias, prevaricación, malversación o apropiación indebida.
Resulta siempre vergonzoso que ocurran este tipo de cosas, algo por desgracia bastante habitual en la corrupta «democracia» actual, pero más todavía en la actual situación de emergencia sanitaria que estamos viviendo, donde miles de personas vulnerables y mayores de 65 años ni siquiera tienen fecha de vacunación.
Desde España 2000 exigimos que se esclarezcan los hechos y se depuren responsabilidades.
