Un grupo de militantes de España 2000 acudimos a la cacerolada celebrada ayer jueves frente al Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana contra los jueces que aprobaron el discriminatorio e inconstitucional pasaporte covid, obligatorio para acceder a locales de ocio y hostelería desde el pasado 3 de diciembre, y que no ha servido para nada, sólo para coaccionar y presionar a la gente a ponerse una vacuna experimental de la que nadie se hace responsable, y que lejos de ser la solución no es más que parte del problema.
Ahora, después de que el presidente Ximo Puig anunciase en el día de ayer su ampliación hasta el 28 de febrero, los jueces del TSJCV tienen la oportunidad de rectificar y demostrar si están del lado de la libertad y de los ciudadanos o de la clase política corrupta.
Desde España 2000 animamos a la gente, vacunados o no, a salir a la calle y luchar por sus derechos fundamentales y por la libertad, por que hoy es el pasaporte covid, pero si lo permitimos mañana vendrán nuevas restricciones aún más graves.
