La Audiencia Provincial de Madrid ha dado la razón a Sandro Algaba, concejal de España2000 en el Ayuntamiento de San Fernando de Henares, ante la denuncia presentada por los concejales de Izquierda Unida, Sofía Díaz y Félix Izquierdo (ahora concejal no adscrito) por las declaraciones de Algaba al relatar en el Pleno de diciembre de 2016, el pasado sangriento de unos de los iconos del comunismo español, Fernando Macarro, más conocido como Marcos Ana.
Izquierda Unida propuso rendir homenaje a Sebastián Fernando Macarro. Quien fue condenado por asesinar a tres vecinos de Alcalá de Henares en el año 1936, sus víctimas, fueron un sacerdote llamado Marcial Plaza; Amadeo Martín, cartero de profesión y Agustín Rosado, labrador.
Los concejales de IU, irritados, junto a los de PSOE y PODEMOS, anunciaron que denunciarían al concejal de España2000 por un presunto delito de odio. La propuesta homenaje presentada por IU fue aprobada con los votos a favor de IU-PSOE-SFHSP, abstención del PP y voto en contra de España2000.
Tras aportar toda la bibliografía y documentos al Juzgado de Instrucción de Coslada, el magistrado dio la razón al concejal de Sandro Algaba, del mismo modo, la Audiencia Provincial de Madrid posteriormente los magistrados han sido tajantes:
“La posición del recurrente se sustenta no en una miope y ciega ideología política, que es capaz silenciar cualquier percepción sensorial y de raciocinio en pro de una causa, sino en la realidad de los hechos tal y como sucedieron […]
Por lo expuesto, el sobreseimiento no puede ser provisional, sino que debe ser libre, ya que hay una falta absoluta de tipicidad del hecho, pues el recurrente se ha limitado a discrepar de una moción de homenaje a una persona que no merece ser homenajeada, debido a los hechos que cometió, no discriminando por ello a nadie, sino limitándose a dar su opinión sobre esta persona y a expresar que no merecía gozar del reconocimiento social.”
Sandro Algaba, una vez recibida la notificación de la Audiencia Provincial, ha declarado “La justicia nos da la razón, no es delito decir la verdad. Me insultaron, vulneraron mi derecho a expresarme como concejal y realizaron una persecución hacia mí por el simple hecho de sacar a la luz la verdad. Ahora esperemos que todos los partidos políticos que participaron en esta cacería pidan perdón y se convoque el Observatorio Local contra la Intolerancia. Además, exigiremos que se publique en los mismos medios municipales que me descalificaron la sentencia del juzgado y que cualquier clase de homenaje a Marcos Ana sea retirado”.